miércoles, 25 de abril de 2012

Hacia lo salvaje... la Final 4 Junior Masculino en Torre Pacheco (por Chema Gómez)

SEMIFINAL “A”CB. ARCHENA - MARISTAS G. GENERALA (Sábado 28, 10.00 horas)

SEMIFINAL “B”UCAM MURCIACB. CAPUCHINOS (Sábado 28, 12.00 horas)

3º Y 4º PUESTO: PERDEDOR “A”  - PERDEDOR “B” (Domingo 29, 10.00 horas)

FINAL: GANADOR “B” - GANADOR “A” (Domingo 29, 12.00 horas)


Sobreviven los más aptos”, por calidad y variedad de los fundamentos técnicos, por ejecuciones equilibradas, correctas y creativas, con los objetivos bien marcados de parar al rival y construir fluidos ataques, pensando las variables del juego con conceptos claros, fuerte el carácter y ofreciendo una gran intensidad física y anticipación, todo previamente trabajado con rigor. Los lobos cazan asociados en la manada, atacan y se defienden juntos, con su jerarquía y roles, y cada lobo contribuye. “La fuerza de la manada es el lobo, la fuerza del lobo es la manada”. The Call of the Wild, El Libro de la Selva y Walden hablan de ello.

Un UCAM-Murcia contundente no dejó lugar a dudas, no permitió resquicios y dominó al C.B. Caravaca. En la lucha, Andrés Carrillo se resintió de la rodilla, y esperemos que vuelva restablecido para el sábado. Joel García, se te echa de menos - recupérate perfectamente, tus compañeros te suplieron bien. Sin el “macho alfa” del grupo, la marca distintiva del UCAM fue su intensidad de juego individual y colectivo, tanto en defensa como en ataque, y como todo empieza con una buena actitud defensiva, ellos la desplegaron con generosidad y se crecieron. Como una cosa lleva a la otra, dominaron asimismo el rebote por fuerza y anticipación, lo que les permitió tener segundas oportunidades de canasta. El gran esfuerzo físico les llevó a un adecuado carrusel de sustituciones para mantener el equipo fresco y agresivo, lo que buscaba Javier Gómez. El ritmo no paró cuando se hacían con la pelota, continuaban hacia unas transiciones ágiles, bien ligadas, con las que llegaban amenazando el aro rival desde el primer segundo, siendo muy verticales al aro y donde los pivots acababan con facilidad cerca del aro, empujando a los defensores de Caravaca debajo del aro y a la línea de fondo para conseguir canastas lo más cerca posible. Carlos Toledo estaba en todas partes, Aaron muy suelto, Antonio Pujante, David Saura, Manu Sánchez, Samuel Vicente y Darío Sarrías dominadores dentro. Muy bien los dos cadetes Juan Oliva y Juan Toledo, aportando como dos más. Álvaro Gómez y David Lucas, muy correctos, dirigieron al equipo con mucha fluidez repartiendo buenos pases a diestro y siniestro.

Caravaca no pudo esta vez con un fortísimo Murcia y se vieron desbordados de principio a fin. Aún así no hay que llevarse a engaño, este equipo está formado por jugadores de primer año que la próxima temporada acumularán toda la experiencia de ésta y progresarán a buen seguro. En su contra está lo corto del banquillo, porque aunque sufrieran lesiones, todo equipo las tiene, otros juniors o cadetes deben dar el salto para suplir y aportar. Los parciales por cuartos lo dicen todo: 27-8/19-6/20-10/15-11, donde únicamente Pozo (13 p.) y Carlos (9 p.) estuvieron a un buen nivel anotador y dando la cara en todo momento, mientras que Eduardo Sánchez (5 p.) estuvo muy bien defendido, siendo el centro de la presión del UCAM-Murcia, y su rendimiento bajó con respecto a otros partidos. David, Iván y Eduardo Martínez hicieron lo que pudieron. Este viernes pasado, el UCAM-Murcia se cobró a su presa el C.B. Caravaca por una abultada victoria 81-35, reivindicándose como el equipo más regular de Octubre a Abril y el que está más en forma en este final de temporada. Se medirá el sábado a las 12.00 al motivado C.B. Capuchinos, quienes han hecho una muy meritoria segunda vuelta y un buen play-off de cuartos.

De nuevo el C.B. Capuchinos venció a la A.D. Infante (64-49), pero en este segundo envite las sensaciones fueron muy diferentes (parciales: 21-17/13-13/4-15/26-4). Los dos primeros cuartos fueron igualados, con ligeras ventajas para el local pero nada definitivas (34-30 al descanso). Capuchinos alternaba la zona 2-3 con alguna defensa individual y A.D. Infante le respondía con otra zona 2-3. Alberto anotaba sus triples, Parra se hacía sitio en la zona con bandejas bajo el aro y segundos esfuerzos, alternando 1c1s de Juan Rubio de un lado hacia adentro con reverso para hacer valer su dominio por altura. Capuchinos se disciplina bien en meter el balón dentro al poste medio para Alberto esta vez de espaldas al aro y anotar o sacar para invertir a otras opciones de tiro y penetración en 1c1. Infante seguía en el partido gracias al desborde de Álvaro Bernal, todo un jugador en continua proyección, buen driblador y atacante del aro con un gran tiempo de vuelo en el aire que le permite decidir entre finalizar o dar un buen pase a algún compañero que se abre y se muestra. Cuando mejore su tiro en estático (y la táctica de su equipo lo favorezca) vamos a disfrutar de un gran jugador. Tuvo más oficio y paciencia Infante en atacar la zona 2-3 de Capuchinos, no bajando su ritmo por ello. Estuvieron intensos en el balance, y salvo algunos errores que acabaron en contraataques de Guillermo y otros por Capuchinos, la primera parte para Infante fue mucho más que buena: estaban alzando su techo de juego. Peli (Miguel Ángel Sáez) participó en el juego con buen criterio colectivo, aún cuando jugó vendado en un gemelo de la pierna, Óscar Méndez iba a más con el transcurso del partido anotando con equilibrio, defendiendo con inteligencia y robando rebotes inversímiles gracias a su ambición y gran salto. Los bases Pepe y Alberto Nicolás aportaron en sus rotaciones y mantuvieron un buen nivel. Urruti muy luchador y siguiendo el juego conseguía valiosos rebotes para que su equipo siguiera en el combate, los pivots Manuel Lorca y Pepe Ibáñez dieron la talla y se unieron al buen nivel general. Óscar Santos tomó responsabilidad y con acierto en algunos momentos acabando 1c1s y tiros meritorios. Juan Gil desbordaba con suficiencia hacia el aro, de fuera a adentro y obligando a Capuchinos a ocuparse mucho de él. Pablo Aguirre anotó sus puntos y ayudó en defensa, y Sergio Mompeán distribuyó bien la pelota a pesar de perder algún balón que se convertiría en contraataque para su rival.

Tras el descanso, con las charlas y los ajustes de sus entrenadores, A.D. Infante salió a comerse el mundo y el 3er cuarto fue claramente para ellos (parcial 4-15). Defendieron en individual presionando más los pases del rival y estando más encima de sus tiradores, presionaron por momentos en toda la cancha y empezaron a anotar contraataques tras los balones robados. Levantaron a su público y se creían capaces de ganar el partido y quién sabe si algo más (38-45, al final del 3er cuarto) con +7 de ventaja y recuerdo que la renta a salvar del primer partido era de -16. Destacados de nuevo Álvaro Bernal, Óscar Méndez y Urruti que estaban en todo omnipresentes. La única desventaja de Infante, por su inexperiencia, fueron las pérdidas de balón que les impidió anotar 8/10 puntos más. Estaban recuperando muy bien las ayudas, se cerraban al centro cuando los pivots capuchinos recibían dentro y saltaban a los tiradores consiguiendo cambiarles los tiros o haciéndoles que doblaran el pase a compañeros. Capuchinos desapareció en estos 10 minutos, nadie destacable. El cuarto final devolvió al Infante a la realidad y consolidó a Capuchinos como un equipo que sabe recuperar, analizar el juego y volver a tranquilizarse para decidir qué opción tomar. Ante la defensa en zona 2-3 de Infante, Capuchinos volvió a circular la pelota fuera-dentro-fuera para encontrar a sus tiradores y la amenaza de sus finalizadores bajo el aro. Alberto García y Juan Rubio buscaron posiciones abiertas y equilibradas para ensartar una secuencia de aciertos de 3 puntos que terminó por doblegar al Infante, anotando 6 triples casi seguidos que yo les contara. Pero el mérito no es sólo de ellos, el equipo jugaba para ellos, disciplinado, buscaban el mejor momento que resultaba ser tras la primera inversión del balón de un lado a otro. Infante o bajó en intensidad defensiva, cuya zona 2-3 no se empleaba y no se abría y cerraba con rapidez, o mejor podían haber optado por la defensa individual y a los tiradores con jugadores altos como tan bien le había salido en el 3er cuarto. Reconocer el terreno, agazaparse, camuflarse y dar el zarpazo son buenas señales de adaptación al medio y evolucionar. También en el baloncesto. Final: 64-49 para Capuchinos. Enhorabuena a Joaquín y sus muchachos. También a José Alberto y los suyos. Enhorabuena a los ganadores y a los vencidos también. Aplausos y ánimos fue la reacción unánime de ambas aficiones con sus jugadores y los del rival. Un lujo.


Jornada 2 22/04/2012

UCAM MURCIA - C.B. CARAVACA 81-35 (20/04/2012, 18:00 horas) 

C.B. CAPUCHINOS - A.D. INFANTE CONSUEGRA PANADERIA 64-49 (21/04/2012, 12:00 horas) 

C. B. ARCHENA - QUEMADORES PEDRO MOLINA BASKET 64-56 (22/04/2012, 18:30 horas) 

MARISTAS GRUPO GENERALA - INDIGO QUIMICA ELIOCROCA 64-59 (22/04/2012, 18:00 horas)


Índigo Química Eliocroca de Lorca viajó a Murcia con dos autobuses para animar a los suyos y superó al C.B. Maristas en aficionados en su propia cancha. El equipo lorquino, compuesto de juniors de primer año y cadetes, disputó el partido en todo momento, demostró casta a raudales y sólo en el minuto final cedió al encorajinado, algo indisciplinado y orgulloso Maristas. Empezó el partido mal para Maristas con las tempranas 2 faltas personales de su pívot Alberto, restándole defensa ante el alto lorquino Antonio J. Morales, perdiendo su equipo calidad en ataque sin él. Fernando Hurtado no acertaba a seleccionar sus 1c1s sin Alberto, jugándose tiros hacia atrás en movimiento y sin ningún equilibrio; su equipo no tenía tiro exterior, estaban nerviosos y cometían pasos y otras pérdidas de balón, por lo que se empecinaban en atacar penetrando para estrellarse con el gran dominador de los tableros Morales. Mientras, Eliocroca Lorca jugaba 1c1s centrales con aclarados que hacían daño a la defensa rival, terminando con bandejas cercanas al aro y resultando dominadores de los rebotes.
Maristas desplegaba una defensa muy floja, no cerrándose a las penetraciones por el centro y las líneas de fondo, no mucho más allá llegó Lorca y el partido fue al descanso con un 29-29, todo en el aire. En el 3er cuarto Lorca arremetió en embestidas contra los murcianos, Morales continuó con su especial exhibición de tapones (más de 15 colocó), sobre todo a Alberto Ballesta a quién llevaba muy controlado y otros en ayuda. José Albarracín acertó con 3 canastas de 2 puntos y Juanma Robles aportó 2 triples de tirador nato. Alejandro López mostró madurez para dirigir a su equipo, bueno más bien para poner la pelota arriba, y pasaban los minutos y la igualdad era total, del 29-29 del descanso al 43-43 del fin del 3er cuarto con una jugada de estrategia similar a la que vimos fallar recientemente en el Real Madrid a Sergio LLul, sólo que Morales la machacó dentro en un alley-oop desde saque de banda con tan sólo 0.2 segundos de tiempo. Espectacular. Destacable fue también la actuación de Pablo Moreno por su garra y acierto en los tiros libres, pero sobre todo, levantando a su grada con cada acción y sus consiguientes brazos arriba de jaleo. Todo un personaje. Como son Fernando y Eduardo en los Maristas, y claro, saltaban chispas. Fernando y Alberto apretaron los dientes en los últimos 5 minutos del 4º cuarto final, Eduardo fuera de combate con algún problema muscular, y al borde de las técnicas, la gresca, el reglamento y rozando la derrota siguieron a flote en el partido. A falta de 6.00 minutos para el final, Lorca ganaba de +6, para Fernando Hurtado y Alberto volver a empatar 51-51 a falta de 4.30. Con sólo 2.30 minutos por jugar, saltaron los nervios: falta de tiro, técnica a Maristas y posesión. Pablo Moreno anotó los 4 TLs seguidos más 2 ptos en la jugada de posesión subsiguiente, para adelantarse 51-57. Se acercó Maristas otra vez 58-59 con penetraciones y un triple de Hurtado, y remontó en el último 1.30 para adelantarlos 61-59 a falta de 4.7 segundos, que tras una nueva pérdida de Lorca en ese crucial momento, sirvió para que Maristas remachara el encuentro con una jugada combinada tras falta y TLs, con Javier López anotando el primero para fallar a propósito el segundo y Alberto ganar el rebote y sacar otra falta de tiro y 2 TLs más, que está vez Alberto sí anotó. Final: 64-59 para Maristas y a semifinales de la Final 4.

No asistí al C.B. Archena-Molina Basket, con triunfo final de Archena 64-56, recuperando los 6 puntos de ventaja de Molina de la ida. Por lo que he podido oír y leer, fue un partido muy intenso, con mucho suspense y de bajo nivel de baloncesto, donde las defensas se impusieron a los ataques y sólo la calidad de los titulares de Archena pudo frenar el fuerte empuje de los jugadores del Molina Basket. Parece ser que los locales recuperaron sus energías y no perdieron las ganas de luchar en ningún momento. El drama llegó a tener su segundo álgido con el intento de 3 puntos de JJ para ganar la eliminatoria, pero el aro escupió el balón.

C.B. Archena vuelve así a disponer de otra oportunidad para hacer un buen papel y disputar su pase a la final frente a los Maristas de Murcia en la primera semifinal del sábado en Torre Pacheco. Como adelantábamos, tanto Maristas como Archena han sufrido para llegar a la Final 4 y a ambos les ha tocado atarse los machos para clasificarse, por lo que la capacidad de competir va a existir y puede darse un choque igualado. Fernando Hurtado, Alberto Ballesta y Eduardo Artigas (si está recuperado) son jugadores orgullosos que son capaces de plantar cara a cualquiera y van a pelear duro, sobre todo en finales apretados. Archena necesitará tener un buen día, y jugar de principio a fin con mucha energía. ¡Qué ganen los mejores y disfrutemos del espectáculo!

Viendo la mayoría de los partidos y atendiendo a los estilos de juego de los equipos en acción, quiero avanzar algunas claves que creo pueden ser determinantes para el desarrollo de las semifinales y finales el próximo fin de semana. Ahí van:
  • El triunfo de la intensidad y la asociación defensivas
  • Cerrar/colapsar el centro de la zona ante las penetraciones
  • Impedir las finalizaciones fáciles del rival cercanas al tablero
  • El control de los rebotes será decisivo
  • Reducir al máximo las pérdidas de balón
  • Buscar buenas posiciones de tiro, los anotadores pueden marcar la diferencia
  • La profundidad de los banquillos con calidad aportará frescura e intensidad
  • La mejor condición física prevalecerá
  • El control del juego, “mix” mental-físico, será decisivo
  • El concurso de algunos cadetes de calidad puede aportar sinergias
Algunos partidos pueden llegar a ser verdaderamente salvajes, de no escaparse algún equipo fuerte como el UCAM-Murcia y romper el choque. Que haya deportividad, y que no llegue la sangre al río. Entre todos deberíamos buscar la evolución de nuestros jugadores, o como cantaba Roberto Carlos: “Yo quisiera ser tan civilizado como los animales”.


Nos vemos en Torre Pacheco.
Chema Gómez